Hubo una vez una gota que no quería morir.
Le parecía tan fantástico el cerezo en flor, y era tan
dulce la luz del mediodía, que le dijo al árbol:
–Guárdame contigo para siempre.
–Siempre nombra lo que no existe –respondió el cerezo–.
Todo lo que nos rodea cambia de forma,
las flores de hoy son mis cerezas de mañana,
las semillas que los pájaros transporten serán
hijos que no veré nunca.
2015: Seleccionado Bienal Ilustración Bratislava
¿Puede una gota de lluvia vivir para siempre?
Una gota de agua empeñada en vivir eternamente, un sabio cerezo que le cuenta que eso es imposible y la aventura de adentrarse en el interior del árbol para transformarse en una gota de savia.
Este libro abre un espacio maravilloso para hablar del miedo a las pérdidas, las separaciones, los cambios e incluso al miedo a dejar de ser niños. Aprender a entenderlo y aceptarlo es fundamental para seguir avanzando con autoconfianza y autoestima. Este libro permite abordarlo con delicadeza y poesía mediante una historia llena de ternura y originalidad.